Alma de la Encina se marcó una 5a posición en nuestro primer 2**!!
Cogí está yegüina apenas 3 meses antes de la carrera, y, de estar parada, se puso en forma en 2. Cuando a penas estábamos a 3 semanas del raid, apareció con piroplasmosis, tuvo 5 días de tratamiento y perdió mucho peso. La semana siguiente seguimos trabajando para poder llegar a Llanes y, aunque muy justas de peso, llegamos.
La mañana del previo, ya en Porrúa, Alma amaneció con la única manta que tenemos, destrozada y una herida en la cuartilla. Pensamos que iba a hinchar y que la yegua no podría correr, pero, una vez más, esta yegua nos calló la boca, no sólo no se hinchaba, sino que seguía teniendo un trote 10, así que seguimos adelante!
Después de poner clavos nuevos en alguna herradura (mi herrador tuvo gripe y me dejó ir a correr con la yegua larga y las herraduras como papel de fumar) Las 2 primeras fases fueron bien, pero al llegar a control, el movimiento intestinal era nulo! Así que tuvimos que ir a reinspección. Con el corazón en un puño y un panel veterinario, conseguimos salir a la tercera fase a toda prisa porque apenas teníamos tiempo de ensillar!
Y parece que estas prisas hicieron a Alma despertar, desde entonces todo fueron “A”s y “1-2 seg”
Terminamos el primer día como unas lechugas, comiendo, bebiendo y con ganas de más.
El segundo día, ya empezamos con prisas, fui sola a primera hora para dar un respiro a mi asistencia, ya que el control era a las 8 y la salida a partir de las 9:30…. Mi sorpresa, cuando pasé a las 8:20 el control, que habían adelantado la salida y tenía que arrancar a las 8:53!
Nunca conduje tan rápido como cuando fui a buscar a la asistencia esa mañana!!!
Y de nuevo, salimos a tiempo!
Después de la primera fase, y con más de 90km a las espaldas, el lastre que había metido a la silla (como buenamente pude, ya que no había dinero para comprar una Mantilla) empezó a hacerle daño al dorso a Alma, por lo que, mientras cambiaban clavos de las herraduras que estaban al límite, cargamos la primera mochila que encontramos con un chorizo de plomo de 6 kg, atada a mi cintura con una acción para estribo.
En la 5a fase, derrapamos en una curva por culpa de las herraduras y, en el mismo pie donde tenía la herida de la manta, apareció una quemadura.
A la llegada, el pulsómetro nos marcó 59ppm pero al entrar a control, quedamos en 64 un segundo después del minuto de espera!!! por lo que nos marcamos un penalti 🤦♀🤦♀🤦♀🤦♀
Aún así, pasamos control y todo A
Con la yegua ensillada, a 5 minutos de la salida a la última fase y a punto de subir para calentar, el herrador se dio cuenta de que la herradura de la mano izquierda había partido y solo nos quedaba media!!!
Como un rallo, este chico puso una nueva en tiempo récord y pude salir justo a tiempo galopando desde la furgoneta del herrador!
Los 3 primeros ya eran inalcanzables, así que en la última fase aseguramos clasificación, que en un principio, era a lo que veníamos!
Llenos de barro hasta las orejas, con millones de contratiempos e incluso enfermos…! Pero cumplimos nuestro objetivo y volvimos a casa más que contentos!
Muchas gracias a todos los que hicieron este raid posible, a la Organización, a los que nos sacaron del barro, a los vecinos de box, que cuidaban mi yegua como si fuera la suya ❤ al herrador relámpago, a ese veterinario que siempre está ahí y a mi inexperta pero eficaz asistencia, que dieron en callo como nunca e incluso a la competencia, por hacer esta carrera emocionante y divertida! . Porque ir a Asturias, siempre es estar en familia ❤❤❤❤
